Adiós al gran Carlos Larrañaga

El actor Carlos Larrañaga falleció ayer en el Hospital Xanit Internacional de Benalmádena (Málaga) a los 75 años, debido a un «fracaso cardiaco irreversible», según comunicó el centro a través de un escrito. El actor, conocido entre el gran público por sus papeles de galán, murió acompañado por su familia, después de varios meses de ingresos por diversas complicaciones de salud. 

Protagonista de series como Farmacia de Guardia (hito de la televisión de los años 90, donde actuó a las órdenes de Antonio Mercero junto a Concha Cuetos) y Tristeza de amor (otro hito, en este caso de los 80, también junto a Concha Cuetos), y también de películas como El extraño viaje (joya absoluta del séptimo arte español, dirigida por Fernando Fernán Gómez), Carlos Larrañaga recibió la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes en 2002. 

Larrañaga había sido ingresado el 20 de agosto con un cuadro de «descompensación cardiaca» en el centro sanitario donde falleció. No era la primera vez. El 9 de enero había sido operado de un tumor en las vías urinarias que provocó que tuviese que ser intervenido en otra ocasión más. Tras ser dado de alta, estuvo ingresado en la clínica Premium entre los meses de marzo y mayo. 

Según reza la nota remitida por el hospital, «aunque inicialmente su situación clínica fue estabilizada, el agravamiento de su función cardio-respiratoria, provocó un fracaso cardiaco que fue irreversible». 

Perteneciente a una de las grandes sagas actorales de España, Carlos Larrañaga era hijo de actores, María Fernanda Ladrón de Guevara y Pedro Larrañaga, y medio hermano de Amparo Rivelles. También fue esposo y padre de intérpretes: se casó con María Luisa Merlo, y de ese matrimonio nacieron Amparo Larrañaga y Luis Merlo, conocidos por sus papeles en cine y televisión, así como Pedro Larrañaga, esposo de Maribel Verdú. Tras separarse de Merlo, estuvo casado en segundas nupcias con la actriz, autora y directora Ana Diosdado. 

Tras su muerte, las condolencias empezaron a llegar desde sus compañeros de profesión. Así, Concha Cuetos dijo, en declaraciones a Efe, que con su muerte se va una parte de su vida, en la que el actor tuvo un gran peso, tanto en lo personal como en lo profesional. 

«Siempre he tenido una debilidad especial por Carlos», manifestó la actriz, que consideraba a Larrañaga como «un hermano». Ambos estuvieron casados y posteriormente divorciados en la serie Farmacia de Guardia. Cuetos recordó con cariño sus «pequeñas peleas», tras las cuáles, siempre se reconciliaban, y lamentó su pérdida porque era «un ser que no se parecía a nadie». Para Cuetos, este año ha sido especialmente duro por los fallecimientos de Juan Luis Galiardo, Paco Valladares y Sancho Gracia, todos «muy cercanos y grandes amigos». Además de Larrañaga, ayer también falleció el músico Bernardo Bonezzi, quien compuso la sintonía de Farmacia de Guardia.

Por su parte, la actriz María Asquerino, quien fuera pareja de Carlos Larrañaga en los años 50, lamentó «profundísimamente» la muerte del actor con el que trabajó en películas como Pequeñeces, de Juan de Orduña, y al que recordará siempre. «Ha sido un grandísimo actor y muy guapo», destacó, también en declaraciones a Efe.

María Asquerino

También quiso sumarse a las condolencias Esperanza Aguirre, presidenta de la Comunidad de Madrid, quien lamentó el fallecimiento del actor, calificándole de «un símbolo y una referencia de inmensa talla y versatilidad de nuestro cine, televisión y escenarios de los últimos 50 años». 

La presidenta envió un telegrama de condolencia a la familia del actor y destacó el papel indiscutible de Larrañaga como «descendiente de actores y padre de actores». Según recordó Aguirre, Larrañaga «interpretó a todos nuestros grandes autores y trabajó con nuestros principales directores, convirtiéndose en el galán por excelencia de la escena española y dejando una huella imborrable en el público con sus interpretaciones en series de referencia, como Los gozos y las sombras y Farmacia de guardia».