Itziar Muguruza, de 36 años, acabó ayer con la vida de su hijo Koldo que había nacido hace 33 días con varias malformaciones. Supuestamente lo asfixió con una almohada y luego se acercó a su marido, Borja Luis, para decirle: «He matado a nuestro hijo». El hombre se lanzó a la habitación y se encontró al bebé sin respiración. Avisó al 112 y trató de reanimarle mientras era asesorado por un médico del Summa a través del altavoz del teléfono móvil. La criatura no recuperó el pulso.
La mujer fue detenida por la Guardia Civil en su piso situado en el número 2 de la calle de María Blanchard de Las Rozas y trasladada a la Unidad de Psiquiatría del Hospital Puerta de Hierro. Sufría depresiones y estaba siendo atendida por varios psicólogos de Las Rozas desde que dio a luz ya que se sentía culpable por los problemas con los que había nacido el bebé. Recientemente su hijo había sido sometido a una operación del esófago y estaba pendiente de otras nuevas intervenciones.
A tenor de las averiguaciones, la mujer sufría una depresión post-parto y vivía atormentada por los males de su hijo ya que los achacaba a la fuerte medicación que había tomado antes del embarazo para superar sus depresiones. El padre, que se encontraba también en la vivienda trabajando con un ordenador en una habitación, no se percató de lo ocurrido hasta que se lo confesó su esposa, momento en el que llamó al 112. El operador pasó al hombre con un médico que fue indicándole como tenía que reanimar al bebé mientras llegaba la ambulancia del Summa.
La propia psiquiatra de Itziar acudió a la casa y explicó a los agentes que la mujer dejo de medicarse durante el embarazo. La homicida confesó a los agentes que había matado al bebé para evitar su padecimiento. Tras ser detenida el juez de guardia ordenó su internamiento en la Unidad de Psiquiatría del Hospital de Majadahonda. Su marido indicó que nada hacía presagiar la tragedia.
Con el máximo respeto a todos por el trágico suceso, me parece fuerte que se vulnere en esta entrada el derecho al honor, la intimidad y por supuesto la protección de datos.
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