jueves, 16 de enero de 2014


La gripe ya es epidemia en Cataluña. Ha superado el umbral de los 110 casos por cada 100.000 habitantes y se sitúa en los 127 por cada 100.000. Ante el aumento de ingresos por esta infección y las cinco víctimas mortales acontecidas en las últimas 48 horas en el territorio español, las dudas sobre si esta gripe se distingue en algo de las epidemias de otros años no dejan de dispararse.

 Médicos y autoridades sanitarias repiten que las cifras actuales en nada difieren de las anteriores y que esta es una gripe estacional más. 

En este sentido, el presidente de la Organización Médica Colegial (OMC), Juan José Rodríguez Sendín, ha afirmado que «lo único de particular» que tiene la situación de gripe en España este año «es que se está contando». Como él, muchos otros expertos han manifestado su tranquilidad ante el aumento de casos, ingresos y muertes por esta dolencia pues, según constatan, son similares a los de otras temporadas. 

Si no pasa nada diferente a lo ocurrido hasta ahora en España, la gripe actual «es gripe», afirma Rodríguez Sendín en declaraciones recogidas por Servimedia. 

Según datos del Instituto de Salud Carlos III de Madrid, nuestro país ronda ya los 93 casos por 100.000 habitantes, una cifra habitual en la estación de gripe. Lo que ha ocurrido este año es que el pico de incidencia se ha adelantado dos semanas. 

El hecho de que en Aragón y en Cataluña se haya alcanzado una incidencia por encima de la media nacional, aclaran los especialistas, es porque la temporada de gripe siempre comienza por el norte. 

Son tres los tipos de virus de la gripe los que pueden afectar a los humanos (A, B o C). Así como el año pasado la cepa mayoritaria fue la B, en esta ocasión las principales son de tipo A (H1N1 y H3N2). Una previsión con la que ya se contaba. La Organización Mundial de la Salud (OMS) incluyó hace tres meses esta cepa entre los componentes de la vacuna de gripe de este año. 

Como explica el director del Centro de Alertas Sanitarias del Ministerio de Sanidad, Fernando Simón, la tasa de hospitalización de esta cepa es el doble de la que ocasionan los virus de tipo B, «aunque en relación con la incidencia total de gripe, sigue siendo un porcentaje muy bajo», informa María Valerio. 

Para las autoridades sanitarias, esta enfermedad no es preocupante en exceso. La mortalidad en pacientes ingresados es del 2%. Dicen los expertos que aunque la virulencia de esta cepa es algo mayor, la duración de los síntomas es más breve. En principio, cualquier persona puede resultar contagiada. 

Sólo en algunos casos puede complicarse con enfermedades más graves como la neumonía. Quienes requieren hospitalización suelen ser mayores de 65 años o personas que tienen otras patologías de salud previas. Una de las víctimas mortales (de Madrid), una mujer de 48 años, padecía EPOC (una enfermedad pulmonar). 

Por ahora parece que esta gripe está siendo más habitual en el grupo de edad de 45 y 64 años. Los expertos señalan que la mayoría de los pacientes ingresados hasta la fecha no se había vacunado contra la gripe, «algo habitual entre adultos jóvenes sanos», puntualiza Simón. Por eso, la secretaria general de Sanidad, Pilar Farjas, recuerda que quienes lo deseen, aún están a tiempo.

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