Suerte. Hubo mucha suerte. La cubierta desmontable de la plaza de toros de Las Ventas se vino abajo y cayó al ruedo durante la madrugada del lunes, a las 4.45 horas. A esa hora un vigilante llamó a los responsables de la empresa concesionaria, Taurodelta, para informarles de que la carpa, de 160 toneladas, había caído sobre el albero «como si fuera un paracaídas». Se acabó el experimento y no habrá conciertos ni festivales en invierno de este año y quizá nunca.
Hubo suerte. No había en ese momento nadie trabajando. La caída se produjo el lunes y no el jueves, cuando estaba preparada una fiesta, con cientos de personas, para celebrar el fin de las obras y que la plaza de toros de las Ventas iba a poder tener uso durante el invierno como había publicitado con orgullo la Comunidad de Madrid.
Aunque el fallo se hubiera producido el jueves de forma lenta, como parece que ocurrió, el pánico por salir del ruedo podría haber provocado una tragedia. Pero la gran cubierta se fue abajo durante las 48 horas de prueba antes de celebrar el primer acto público.
La carpa estaba sujeta con unas largas vigas o tiradores que arrancaban desde la ultima fila de la grada e iban a un anillo central, que fue el que se hundió y arrastró el gran toldo y su estructura metálica.
La estructura de acero y aluminio, con un diámetro de 102 metros y un peso de 160 toneladas, quedó tendida sobre la tierra. Algunas de las vigas estaban rajadas. La dirección de la plaza no permitió acceder al interior del coso como medida de seguridad. La realidad es que parece que ya no hay peligro, pues las 160 toneladas reposan sobre el suelo.
La plaza de toros, un edificio con protección cultural, no sufrió ningún daño, según la empresa concesionaria, Taurodelta, y el constructor, Grupo Plus. Carlos Abella, gerente de la plaza, fue más prudente, y explicó que los técnicos de Cultura de la Comunidad de Madrid harán una revisión para comprobar si tanto la estructura como otros elementos de la plaza ha sufrido algún percance.
La obra tenía su correspondiente seguro, según informó José Luis Cervero, representante de la constructora Grupo Plus.
Nadie sabe qué ha pasado. Ni el propietario de la plaza (Comunidad de Madrid), ni la concesionaria (Taurodelta), ni el constructor (Grupo Plus), ni los diseñadores de la carpa (Spantech y Cedetti).
José Luis Cervero dijo que no se explican cómo ha podido suceder «este desastre». Indicó que se vino abajo tras ceder la corona central sobre la que descansan las vigas que se encuentran con la estructura de la plaza. Ahí parece que está la causa de la caída. En una de las coronas, que podría tener algún defecto y que ha arrastrado el complejo de acero y aluminio. También hay quien piensa que el viento de los últimos días puede haber afectado a la obra.
La cubierta se instaló siguiendo todas las instrucciones de montaje que hicieron los ingenieros y técnicos de Spantech y Cedetti, empresa que tiene su sede en Estrasburgo (Francia). El día de la presentación se aseguró que esta misma sociedad colocó carpas similares en Londres, pero en ningún caso tenían un diámetro de 102 metros, como la Plaza de en Las Ventas.
Dicen que tienen seguro, pero aún no se conoce quién se hará cargo de los 3,5 millones de euros que dijeron había costado el proyecto, que se ha hecho en colaboración entre Taurodelta, concesionaria de la plaza, y Warner Music, sociedad especializada en eventos de todo tipo. El acuerdo tenía una duración de tres años.
La cubierta iba a estar montada hasta el próximo día 24 de marzo, domingo de Resurrección, fecha en la que arranca la temporada taurina en el coso de la calle Alcalá.
Las obras han debido ser complicadas. Cuando comenzaron, en noviembre, los responsables de la iniciativa dijeron que iba a estar terminada en un mes. Esperaban tener lista la cubierta en diciembre. Madrid iba a tener un nuevo espacio de ocio para 19.000 personas en las gradas y 1.800 en la arena.
Los problemas empezaron pronto. El Ayuntamiento de Madrid envió una pareja de la Policía Municipal para ver si tenían licencia de obras. Ayer, José Luis Blanco (Taurodelta) indicó que tienen la licencia emitida por la Gerencia de Urbanismo desde el pasado día 15 de diciembre.
Los responsables de la Comunidad de Madrid se desmarcaron ayer de un proyecto que hace poco fue presentado como un nuevo escaparate para Madrid. El presidente de Madrid, Ignacio González, anunció que la cubierta de la Plaza de Toros de Las Ventas no será instalada tras haberse desplomado la estructura durante unas pruebas de carga, informa Europa Press.
González aseguró que la cubierta desmontable «no ha superado las pruebas» de carga y añadió que no hay garantías de que la estructura pueda cumplir los parámetros de seguridad, por lo que ha anunció que «no se permitirá la instalación».
Por su parte, Salvador Victoria, consejero de Presidencia, explicó que la «voluntad» del Ejecutivo es que el proyecto resulte «paralizado» al menos «durante esta temporada» porque no quieren asumir «ningún riesgo de seguridad».
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